Con una simple prueba de movilidad se puede percibir cuando el movimiento de la columna vertebral está limitado. Cada nivel ha sido categorizado por la neuro-anatomía y no es difícil reconocer dónde se encuentra la disfunción en el cuerpo tan pronto has localizado el bloqueo en la columna. Éste era un aspecto.

Pero todavía me quedaban dudas. Me di cuenta de que había muchas personas que a pesar de tener un bloqueo en la columna vertebral, continuaban funcionando normalmente, sin tener molestias. A veces, años más tarde, de pronto presentaban algún síntoma que podía estar relacionado con ese bloqueo.

Entonces me planteé que debía haber otros factores que determinaran la aparición del síntoma, no sólo un trauma, como una caída por las escaleras. Así es como llegué a la mente, realmente la base del ser humano único. Una persona puede tener un bloqueo de joven y llegar a vivir ochenta años sin tener nunca ningún síntoma real. Otra, sentirá molestias desde el primer momento del bloqueo. Debe haber algo más que una mera anomalía mecánica en el mecanismo motor.

El conocimiento del sistema psico-motriz desde distintas disciplinas, como la actividad mental en combinación con la acción de los músculos, me ayudó también a desarrollar la capacidad de reconocer en un estadio muy primario cuando alguien no está bien. Sin embargo, todavía no podía responder a la pregunta de por qué algunas personas registran molestias, por qué sufren dolor en las más variadas formas en las que el dolor aparece.

Debía haber algo especial en el ser humano, algo que en cierto momento provoca que las dolencias afloren a la superficie junto con las anomalías que ya se registran médicamente.

Además de examinar a los pacientes, se puede también observar el funcionamiento social y la interacción personal de muchas otras personas. Yo hice un estudio sobre los cantantes profesionales, que tienen que actuar cada noche, día tras día, y también sobre actores y bailarines. En cada función, se expresan de forma diferente. ¿Por qué? Conocen las palabras, conocen la técnica vocal, conocen la coreografía. Y a pesar de ello cada noche ese individuo único produce una expresión diferente. A veces es una expresión de calidad ínfima, a veces alcanza los niveles más altos de creatividad.